

Lo bueno de ir en esta época del año es que la cantidad de turistas es menor, y se pueden visitar los lugares con mucha tranquilidad. Además, la ciudad no es tan grande y se puede visitar a pie sin problemas. El clima estuvo bastante benevolente con nosotros, ya que casi no nos llovió, y eso que ibamos preparados hasta para la nieve que se pronosticaba.



Un paseo atractivo es ir caminando hasta la cima de Arthur's Seat, que es el punto más alto de un volcán inactivo, y desde donde se puede tener una muy bonita vista en altura de la ciudad. Eso si, el paseo es más recomendable en primavera o verano, cuando el clima y el viento no son tan frios.
Otro lugar que merece ser visitado es el Royal Botanic Garden, el cual es un gran espacio dedicado a mantener vegetación de todas partes del mundo, estudiarlas y conservarlas en un Parque (de entrada gratuita) que es muy bonito, y que vale la pena conocer. Eso si, hay que ir un día que no esté lloviendo, y que ojalá no haga mucho frio, ya que el paseo, obviamente, es al exterior.
Los escoceses son en general bastante agradables, y tienen un poco de ese aire más "provinciano", producto de que son menos habitantes (alrededor de 500.000) que las grandes ciudades europeas.
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